domingo, 4 de marzo de 2007

Sobre princesas encantadas y dragones

Cuentan las leyendas de caballería heroica, que allá donde se encuentre un caballero de brillante armadura existirá una doncella custodiada por un dragón, las leyendas a veces son ciertas, al menos en parte, pero los tiempos cambian y allá donde fuere un caballero de rubia melena ondeante al viento y unos ojos azul cielo oteando el horizonte en búsqueda del refugio de tan vil criatura como es un dragón, galopando un brioso corcel de blancas crines en estos tiempos que corren a veces por las circunstancias y a veces por la ausencia de medios, nos encontramos caballeros como el de la historia que cuento, sentaos pues y aprended la lección, pues nuestro protagonista la aprendió y su precio...



pagó :


Su nombre fue olvidado hace mucho, mas su nombre no es importante, además, que mas daría pues siendo conocedor de las artes oscuras jamás daría su verdadero nombre, quizás el de pila, quizás el sobrenombre, pero nunca el verdadero, o casi nunca...

De el podemos contar una y mil leyendas que corren de boca en boca, unas buenas, otras malas, muchas de ellas exageradas y tantas otras por desgracia envileciendo sus actos por personas llenas de envidia, que no codiciaban mas que lo que el poseía, que siendo sinceros no era poco.

De el podemos decir lo que conocemos, lo que sabemos o lo que simplemente llego a nuestros oídos de la única fuente que pudimos conseguirlo, era un caballero oscuro, de negra armadura y capa raída ondeando al viento, su rostro surcado por mi cicatrices con mil criaturas distintas tan solo podía transcribir parte del estado de su alma y su corazón, sus ojos brillaban llameantes en la noche y un pesado mandoble colgaba de su cinto sin llegar a tocar el suelo debido a su tamaño.

Se encontraba él cansado, abatido, derrotado, mas con ganas de seguir adelante y no buscar nunca mas a esa princesa de la que hablaban las leyendas, pues muchas criaturas había enfrentado y tras ellas solo había encontrado otra clase de criaturas mas viles, pero no por su naturaleza como podrían ser las que yacían a las puertas de la guarida, sino de corazón negro y oscuro, encerradas tras su criatura correspondiente por el bien del resto de la comunidad en tiempos remotos y lamentablemente liberadas por el.

Pero le llego un rumor, una leyenda, de una princesa de belleza sin igual atrapada en un oscuro pozo insondable del que se hablaban mil maleficios, donde solo un loco o alguien con una férrea voluntad seria capaz de entrar a rescatar a dicha doncella, pues la criatura que la guardaba era la mas terrible de entre todas las criaturas que podían guardar a una princesa, un temible dragón de escamas negras como la noche mas profunda y ojos de un amarillo sulfúrico, lo medito por dos lunas y al final decidió realizar la que el esperaba que fuese su ultima hazaña contra un ser de las tinieblas y encontrar a su doncella, tomar su mano, mirarla a los ojos y con su baliset entonar la mas bella de las melodías y encandilar su corazón aun estando empapado de sangre de la temible criatura que la guardaba, sabia que ella no lo rechazaría tras tamaña gesta y sus palabras conseguirían ablandar hasta el corazón del mismísimo Ozmandias guardián de la historia convertido en piedra viviente, no podía fallar, al menos respecto a lo que el podía hacer...

Camino durante largas jornadas atravesando oscuros y tétricos paisajes sospechosamente desiertos, se preguntaba cuan terrible seria la criatura si no existían otros seres capaces de convivir con el, a dos jornadas de distancia acampo en un llano oculto entre montañas y allí encontró a un ángel de rostro, guerrera de apariencia, que mirándolo a los ojos y llamándolo por su verdadero nombre le dijo:

"cuidado con las apariencias, no todo es lo que parece"

Tardó un parpadeo en esfumarse y el desenvaino su mandoble buscando a aquel ser que acababa de desvanecerse ante sus ojos, pero no hallo rastro de el, su sueño esa noche fue turbador, pero por desgracia como la mayoría de las veces era incapaz de recordarlo, solo sabia que esa criatura que había desaparecido había tomado un papel importante en sus sueños

Llego a la boca de la enorme abertura en el suelo el sol acababa de ocultarse, saco sus cuerdas y comenzó a descender lentamente y escuchando por si la bestia que guardaba a la princesa surgía de entre las tinieblas que lo rodeaban y acababa con el de un fulminante ataque, mas no fue así, llego al fondo de la abertura y siguiendo el sonido de una voz angelical llego a una puerta atrancada por cuyos marcos se entreveía un poco de luz y se escuchaba la voz de su princesa.

Desatranco la puerta, descorrió el pestillo y atravesó el umbral, las dependencias de la doncella no eran demasiado grandes pero si funcionales para cumplir todas sus necesidades, atravesó la estancia con los ojos y dio con ella, de figura esbelta, con ojos verdes y rubicunda melena, hizo una reverencia ante la cual ella sonrío y saco su baliset y comenzó a tocar para ella, emulando con su voz lo que su corazón tanto anhelaba, hablando a la vez con los ojos y ella escucho y le miro, se acerco a el entrelazo sus manos con las de el y le beso en los labios, lagrimas de felicidad corrieron por sus mejillas, y entonces fue el quien le devolvió el beso, un beso con el fuego de la pasión, mientras una de sus manos se encontraba en la espalda de ella, la otra le acariciaba suavemente la mejilla y allí bajo la luz de las velas que iluminaban la estancia se juraron amor eterno y se entregaron en cuerpo y alma el uno al otro...

Quedaban pocas horas para el amanecer y el pensó que ella después de tanto tiempo allí encerrada desearía verlo con sus propios ojos y no a través de los de el en forma de canción

Tomo las posesiones de ella que deseaba llevarse y acercándose al lugar por el que había bajado la tomo a ella por la cintura y la llevo a su espalda, indicándole que se agarrase fuerte hasta que llegasen a la superficie, ella en su espalda se agarro y el noto que pese a su esbelta figura esos suaves brazos tenían bastante fuerza.

Por fin tomaron la superficie escasos minutos antes del alba, cuando aun la luna brilla en el cielo y el horizonte comienza a tornarse con esos colores violáceos que indican que el amanecer esta cerca, el la tomo de las manos y la miro a los ojos contándole mil maravillas que verían juntos, que harían juntos y que disfrutarían juntos, ella soñó se hizo participe de los sueños de el, tenían toda la vida por delante para compartirse mutuamente...

El sol comenzó a despuntar tímidamente al principio, en ese momento el la apretó contra si, la miro a los ojos y la beso dulcemente en los labios, sus lenguas jugaron en la boca del otro, pero el noto algo extraño en sus labios, un sabor... extraño, mientras el sol salía por el horizonte ella inspiro por la nariz y expulso el aire por la boca, por los labios que ahora le besaban, pero lo que salio no fue aire sino acido y el con el interior convertido en bilis solo consiguió mientras moría arrodillado articular una pregunta con sus labios.

"¿por qué?"

Ella tomo su verdadera forma extendiendo sus negras y correosas alas y arrojando de un coletazo el cuerpo de el al profundo pozo en el que había sido encerrada y quizás por piedad quizás por despecho quizás por odio, respondió a la pregunta de un hombre muerto :



"No existen princesas encantadas y dragones, solo dragones encantados"

4 comentarios:

Corina dijo...

El relato está dentro de la línea de los cuentos fantásticos de dragones y mazmorras, etc.
Muy chulo. ¿Y las tildes? ;D.

Manu dijo...

Corina:
Muchas gracias ^^
Ya está editado y he subido un Black Dragon y todo ;)
Aunque, como digo en la otra entrada, me tengo que tragar mis palabras y esto queda solo como un cuento, las leyendas existen...
Ains =)
Un beso!

Corina dijo...

Muy chulo el dragón.

Manu dijo...

Corina:
Las maravillas de Deviantart ^^