jueves, 29 de marzo de 2007

LA BÚSQUEDA ACTO IV : AGUA

Esto es algo que escribi hace un año, es una historia compuesta por cinco partes, cuando inicie una busqueda, pero fui inconsciente en ese momento al buscarla ya que lo que encontre, se parecia a lo que he buscado siempre, pero era incompleta, imperfecta, hay cosas que no hay que buscarlas, solo dejar que el destino las traiga a nuestro camino...

AGUA

Paso horas caminando, aparentemente sin rumbo, sin destino, cabizbajo, su respiración era entrecortada y parecía al borde del colapso, atravesó llamado por el cuarto elemento, un bosque, trastabillando con las raíces de los árboles, tropezando con los montículos, viendo su rostro surcado de nuevos arañazos por las ramas de los árboles y casi arrastrándose llego al borde del lago coronado por una bella cascada, su aspecto físico era, cuando menos preocupante, su estado febril había hecho demasiada mella en él y perlas de frío sudor recorrían su frente, la piel cuarteada por el rostro, el pelo áspero, los labios resquebrajados, los ojos inyectados en sangre, pero con ganas de seguir luchando, de continuar con el camino que había comenzado, de seguir buscando aquello, que había desestabilizado lo que llamó felicidad en un momento que parecía tan distante como las estrellas, sus ropas otrora limpias y pulcras se encontraban cubiertas de toda la suciedad hallada en cada caída al suelo hasta llegar aquí, miró a las profundidades del lago y éste le devolvió la mirada, atrayéndolo para sí e invitándolo a zambullirse en sus oscuras aguas, se despojó de su abrigo, lo arrojo al suelo y comenzó a penetrar en las aguas, que para cualquiera que hubiese sentido algo estaría helada, pero él ya había sacrificado el sentir nada a través de su rota piel para encontrar una respuesta, poco a poco se fue internando, paso a paso, el agua cubría su enorme cuerpo, hasta llegar al pecho, solo un paso más, y todo rastro de él se perdió bajo las aguas...


...dos cuerpos bajo una gruesa manta susurraban palabras contando todo lo que había acontecido en ese día, cada pensamiento cada sentimiento, cada palabra y cada acto pues no era por curiosidad, solo por conocerse mejor, sus manos entrelazadas jugueteaban ajenas al resto del mundo, no había nada que esconder entre los dos, pues en eso consiste el amor, en respeto, cariño y confianza, la mano libre de ella comenzó a juguetear con los caracolillos de pelo que a él se le formaban en la parte de atrás de su cabeza mientras seguían conversando, mientras él hablaba sobre cómo había salido de una comprometida situación en su trabajo, ella lo silenció, casi clavando sus uñas en su cabeza y atrayéndolo casi obligándolo a besarla, ese juego le encantaba a ambos, él dio algo de resistencia la justa para que ella creyese que le había molestado para al instante siguiente acercarse velozmente a su rostro y besar sus labios con pasión, la mano de ella paso a su espalda, la mano que estaba entrelazada se soltó y ella lo abrazo mientras se besaban cada vez con más pasión, cediendo y recuperando terreno el uno al otro, él mientras tanto con una mano terminada en afiladas uñas acariciaba suavemente su columna vertebral, mientras que con la otra acariciaba su rostro a la par que no cesaba de besarla, ella lo empujó casi violentamente para alejarlo de ella, él paró asombrado y ella susurró lascivamente a su oído una petición que no le sería denegada, ella intentó volver a besarlo, pero él con una mano puesta entre sus senos la empujo suavemente hacia atrás mientras que con la otra le desprendía de la ropa interior que llevaba puesta, para acariciar suavemente el poco poblado monte de Venus y seguir buscando su objetivo principal un poco más abajo, sus dedos encontraron la zona como esperaba, mojada y esperando, pero primero quería jugar un poco con ella, comenzó a mover los dedos lentamente hacia arriba y abajo, atacando presionando suavemente en círculos en una delicada y pequeña protuberancia existente cerca del comienzo de su vello, notando como la sangre comenzaba a circular violentamente por la zona debido al aumento de temperatura y a los ahogados gemidos que ella estaba intentando disimular mordiendo la almohada, subió la mano para ver el efecto de sus caricias, al separar los dedos un fluido viscoso se hallaba entre ellos, ella lo estaba mirando con fascinación, ahora que lo tenia tan cerca de la cara, él la miro a los ojos con lascivia en la mirada mientras lentamente comenzó a lamer sus propios dedos para provocarla, ella intentó levantarse pero de nuevo su mano se poso en su pecho y suavemente la postró de nuevo en la cama, separó sus piernas suavemente y apoyó sus manos una en uno de sus pechos y la otra en el abdomen, su cuerpo dejó de estar al lado del de ella para situarse casi fuera de su alcance mientras que sus labios besaron su escote, saco la lengua poniéndola dura y comenzó a descender separándola en dos con el surco de saliva que su lengua iba dejando, se entretuvo alrededor del ombligo, besando, dando pequeños y juguetones mordiscos que hacían que ella diese pequeños y ahogados gritos mezcla de dolor y placer, mezclados con sorpresa, pero su destino no era su abdomen, derivo hacia la izquierda y su lengua se vio en el canal gemelo en forma de V que tanto le excitaba, comenzó a bajar por el, sin ir directamente a su objetivo sino a jugar un poco mas con ella, besando la cara interior de su muslo izquierda, lamiendo con la punta de la lengua las zonas mas suaves y mas sensibles que otras veces había acariciado y había conseguido el mismo efecto que ahora, que todos el vello de su cuerpo se encrespase, movió la cabeza hacia la derecha paso por delante de la entrepierna de ella, que en estos momentos ya estaba completamente empapada en sus propios fluidos, rozo levemente con la punta de su pequeña nariz el pequeño botón que ella tenia bajo el monte de venus mientras que abría la boca y exhalaba a sus labios humedecidos un poco de aire, lo que provoco que ella se estremeciese, cuando la cabeza llego al muslo derecho ella se incorporo levemente, agarro dos manojos de su pelo y arrastro su cabeza al destino final que tenia su pequeña incursión a aquella zona de su cuerpo, saco su lengua y comenzó a lamer arriba y abajo la zona central, las manos de ella soltaron su cabeza, para dirigirse una a la boca, y la otra a acariciar uno de sus suaves pechos, el mientras paso con su lengua a un lateral, al otro, para centrar la punta de la lengua en la cima de sus labios limítrofe con el poco vello que tenia, cada movimiento de su lengua obtenía como resultado que el cuerpo de ella se encrespase, su columna se arquease y tuviese que morder sus propios nudillos para no gemir mas alto de lo que podía en el lugar donde estaban, el continuaba sin descanso saboreando los flujos que de ella salían, degustando el sabor metálico de su entrepierna con cada uno de sus arqueos de espalda, las manos de ella se dirigieron de nuevo a su cabeza, esta vez para alejarlo de ella antes de que sus caricias la volviesen loca, deseaba otra cosa de el que no era su lengua, nuevamente agarro sus cabellos casi como si el fuese su esclavo sexual y lo atrajo hacia si, lamió sus propios flujos de la cara de el y mirándolo con ojos de quien ya ha degustado el placer y quiere el plato principal, le susurro al odio “fóllame salvajemente” , el dejo su peso apoyado en la mano izquierda mientras que con la derecha buscaba en la mesita de noche el objeto protector que el permitiría terminar lo que había empezado sin miedo a la llegada de algo que ninguno de los dos quería por el momento, clavo las rodillas en la cama, ella tenia las piernas abiertas y con una mano acariciaba uno de sus pechos y con la otra levemente su entrepierna, el olor de esta llegaba hasta su delicada nariz y lo excitaba mas aun si podía ser, el abrió el paquete de plástico de color metálico y extrajo el objeto de látex, su miembro se erguía altivo y poderoso cual prisma desafiante, coloco la protección a su alrededor verificando que todo él había sido envuelto por el objeto de látex, puso su mano sobre la parte superior del tronco de su miembro y lo empujo hacia abajo para soltarlo después, era tal la sangre que bullía en el que nada mas soltarlo salió disparara hacia arriba dándole con la punta por encima del ombligo, tal era el ritual de colocación que siempre realizaba, la miro con ojos lascivos y hambrientos, y ella le devolvió la mirada, arrastro las manos hacia donde estaba la cara de ella, acaricio su rostro suavemente y deslizo sus manos hacia los lados para que su cara quedase contra la de ella, aunque ella le había hecho una petición, el no se la concedería, no era un juguete para tratarla así, su mano derecha agarro su miembro y lo coloco donde minutos antes había estado jugando su lengua, movió suavemente su cadera hacia delante muy despacio, el acto reflejo de ella fue expulsar todo el aire que tenia en los pulmones a la vez que las uñas de una de sus manos se clavaran en la espalda de el, que siguió empujando suavemente, ella comenzó a jadear entre soplidos, susurrándole que menos mal que no le había hecho caso, aunque no llevaban demasiado tiempo disfrutando del cuerpo del otro, pero el ya conocía el de ella a la perfección y sabia que no soportaría sin dolor, la petición que le había hecho, el se encontraba por completo dentro de ella y ella se retorcía bajo el como una serpiente, sintiéndolo chocar contra sus paredes interiores y acariciando lugares inaccesibles para otras personas, el comenzó a mover su caderas adelante y atrás lentamente, los gemidos de ella iban en aumento, llegando momentos en que por miedo a que sonasen mas altos unos que otros el ahogaba dichos gemidos tapando su boca con la de el, mientras sus brazos sostenían el peso de tu torso y sus caderas se movían cada vez mas deprisa haciendo que su miembro entrase y saliese de ella, el miraba con fascinación el rostro de ella, excitándose cada vez mas cuando ella le devolvía la mirada y a la vez movía su musculatura apretando como si de un orgasmo se tratase a su miembro, cosa que a el le producía gran placer, el deslizo sus manos tras la espalda de ella, agarrándola y levantándola para situarla encima de el, el mantenía sus rodillas clavadas en la cama y las piernas flexionadas, el tronco ligeramente curvado hacia atrás y ella sentada a horcajadas sobre el, agarrando su cuello, con sus piernas rodeando su cintura y apoyadas en la zona que sus piernas dejaban libre detrás, marcando ahora ella el ritmo, sin darle a el tregua a recuperarse de la explosiones de placer que ella con sus contracciones musculares provocaba, estaban enzarzados en un combate donde el vencedor seria quien arrancase el orgasmo total del otro en primer lugar, ella seguía gimiendo tenuemente pero aumentando su excitación por momentos, ya que ahora era ella quien llevaba las riendas, el por su parte dio buena cuenta de los suaves pechos que ante el se movían salvajemente arriba y abajo junto con el cuerpo de su amante, su amada, su compañera, lamió el pezón y la aureola, mordisqueando suavemente a veces un poco mas de la cuenta a la vez que ella no dejaba de moverse, ella comenzó a moverse con mayor rapidez casi como buscando el placer propio y perder la contiendo antes de seguir en la locura de las puertas del orgasmo, la presión que rodeaba a su miembro aumento, el decidió tomar de nuevo las riendas, y colocando una mano en el trasero de ella y otra en el colchón, se puso al borde de la cama, ella seguía moviéndose arriba y abajo y contorneando sus caderas salvamente, solo quería llegar al final con el dentro no deseaba otra cosa fuese en la postura que fuese, el de improviso agarro su trasero y se puso en pie sin llegar a salir del interior de ella, ayudándola a moverse pues ella el único punto de apoyo que tenia ahora era a través de sus rodillas situadas en las caderas de el, el con ambas manos situadas en su trasero solo la levantaba hacia arriba y dejaba que cállese por su propio peso encima de su miembro, acción que mezclada con los gemidos entrecortados de ella, sus manos clavadas como garras en su espalda, la presión que aumentaba en su entrepierna, y el olor de la piel de ella comenzaban a llevarlo al punto cúspide y final del acto, acercaron sus bocas se besaron con pasión y ella acerco sus labios a la oreja de el y tras lamerla suavemente, le pidió, casi le rogó que ambos alcanzasen el clímax juntos, con esta petición el abrió un poco mas las piernas como para afianzarse un poco mejor al suelo y aumento la velocidad con la que empujaba el cuerpo de ella hacia arriba, pero ya no la dejaba caer por su propio peso sino que era él el que la atraía hacia si mismo, con una velocidad cada vez mas creciente, los gemidos de ella aumentaron pero el hizo caso omiso de esto y aumento aun mas la velocidad, ella arqueo su espalda con violencia hacia atrás hacia atrás desgarrando tenuemente la espalda de del con sus uñas, la respiración de el aumento de ritmo, no había dejado escapar ni un solo gemido durante todo el acto y ahora solo escuchaba su propia respiración y el latir de su corazón en sus oídos, antes de que sus uñas comenzasen a desgarrar la espalda de el, el había sentido un latigazo eléctrico desde la base del cerebelo hasta el final de la columna, lo que le llevo a la tensión completa de todo el cuerpo y del arqueo de la espalda, sin dejar de sostener el cuerpo de ella , por trasero y el centro de la espalda, un gruñido ahogado surgió de la garganta de el con cada salto que ejecutaba su miembro en el interior de ella derramando su semilla en el objeto protector previamente colocado, con cada salto, cada nueva descarga de esperma, su espalda se arqueaba recorrida por una nueva sacudida eléctrica y un nuevo y ahogado gruñido como de un animal salvaje, surgía de su garganta, ella estaba flácida, el la levanto para mirarla a los ojos, sus miradas se cruzaron y el le susurro sin dejar de mirarla “te amo” ella aparto la mirada.....

...todo se volvió negro en ese instante, el calor que hacia segundos había sentido se había esfumado como el aire de sus pulmones, la humedad pegajosa del sudor había sido cambiada por el frío envolvente del lago.

No hay comentarios: